jueves, 26 de marzo de 2009

:: “¿Cómo es la vida?”::



Me lo pregunto directamente.
Quede en mi silencio, con mi perdida mirada.
Volvió a preguntarme con más insistencia.
La mire a los ojos; sin respuesta alguna.
Bajo la cabeza con melancolía.
Mire perdidamente de nuevo.
Y respondí absorto de lo que decía.
“No hay mucha diferencia a la tuya”
“Lo dices porque aun no has vivido”.
“¿Y tu si sabes de ella?”
“Lo suficiente como para contentarme conmigo misma”

Hay cosas que se pueden aprender simplemente, pero no estamos capacitados para reconocerlas. Aunque uno nunca deja de hacerlo.

No hay comentarios: